A la falta de seguridad en los trabajos
se une una realidad aplastante:
LOS BENEFICIOS DE ESTE PETRÓLEO NO SERÁN
PARA CANARIAS
(ni para los canarios)
Proyecto Europa 2030. Retos y oportunidades.
El Informe del Grupo de Reflexión sobre el futuro de la Unión Europea en 2030,
elaborado en mayo de 2010,
alerta que en ese horizonte temporal el viejo continente
puede verse sometido a desestabilizaciones Sociales, Económicas y Políticas
originadas por una demanda energética creciente
y un descenso de las materias primas (gas, petróleo)
necesarias para la obtención de esa energía.
Este panel de expertos considera que la era del petróleo barato parece haber tocado a su fin, reclamando una importante inversión pública para desarrollar lo que denominan una
Revolución Industrial orientada a
“La búsqueda de fuentes de energía renovables que sean viables.”
Lamentablemente los sondeos de Repsol y la posible extracción de petróleo en nuestras costas han llegado como Cantos de Sirena que nos confunden cuando nos susurran un maná inagotable que nos sacará del pozo de la recesión económica.
En un debate más sosegado y sin cantos de sirena nos afianzaríamos en la idea de que si nos coge el cenit de los recursos convencionales sin haber implantado sistemas basados en las energías renovables y políticas de ahorro energético, nuestro desarrollo económico se vería seriamente comprometido, y las tensiones sociales sobre las que habla el informe antes mencionado se producirían también en Canarias.
Por eso, lejos de sirenas con mostacho que nos prometen oro negro en abundancia, sería muy recomendable que quienes diseñan el modelo energético para el archipiélago conocieran de la existencia de estudios realizados que permiten deducir que gran parte de las demandas energéticas de Canarias pueden cubrirse con este tipo de energías renovables.